.
.


16 marzo, 2011

Inteliegente.

.

Dedicarme a mí.
A mis objetivos.
A mi familia.

Con calma, no buscar, pero sí saber que hay alguien ahí que no tendrá que elegir.
Que seré, sencillamente, lo más importante para él.

Y que jamás habrá dicho te amo ni pedido matrimonio a nadie,
pero a mí sí.

Que esté loco por estar conmigo, todo el tiempo posible.

Y que valore mis cualidades.
Y le parezca preciosa.

Sin más.

.

Tiene que existir.
Pensé que serías tú.
Y cuando amenazabas, tras todo mi dolor, con que un avez perdido, podría darme cuenta de lo perdido...me he preguntado...espera...

¿la joya egoísta que sólo piensa en que hay que marle a é, cidarle, mimarle, y no mueve ni un dedo en todo el día?
¿la misma que ni me hace el amor ni sabe acariciarme ni un `´apice de mi piel?
¿la misma que no está dispuesto a pasar todo el tiempo posible conmigo y no me hace sentir única, importante o especial?

Ajá.
Sí menuda pérdida.

Pero es que veo su carita y....

Lo terrible ha sido que, de repente, ni lo más básico existe: ya no puedo confiarme a tíu, porque no admites nada de cuanto te digo..sinop que amenazas con dejarme.

Gdenial.

Y no sé qué hacer, claro...
pero me has roto la iluisón, básicamente.

.

Tonta

.

Es cierto, estoy zumbada.
Desequilibrada emocionalmente, no estoy preparada para una relación.
Decepcionada de tantos intentos frustrados, estoy a la defensiva.

Pero tampoco creo estar tan loca si con pocas señales, veo el mismo juego una y otra vez.

Algo me decepciona, por exceso o por defecto.
Me duele.
Lo trasmito.
El otro se siente ofendido.
Piensa en dejarme.
No piensa en mi dolor, o cuanto le digo.
Pido perdón.
Yo.

Fin del bucle.

Analizo, a base de duchazo, que mis virtudes son vistas como defecto.
Que la doblegación sobre mi persona pasa por no dejarme hacer nada.
Que la ayuda es inexistente, incluso en cosas básicas.
Y que todo me recuerda a otros caraduras que me han tratado de sumisa, estúpida.

No quiero hacer de este quejicoso blog, para variar, cuaderno de bitácora de una cada vez más depresiva, por pesimista, quinceañera de diario, una hilarante y patética comedia, para terceros.

En este caso, le miro.
Y siento que algo me une a él.
Enamoramiento, o cariño, o amor. O necesidad. Yo qué sé.

En este caso, la diferencia es que su rostro rezuma inteligencia y bondad.
Cierta ternura me embarga en cuanto le miro, y sabiéndome insuficiente, caprichosa o aniñada ahora, tampoco estamos en situación de exigir.
Ni juzgar, posiblemente.

Ójala aprenda de una vez a ver las cualidades y pasar por encima de los defectos.
De SENTIRME por fin agradecida y feliz por lo que se me da, en lugar de desgraciada por lo que no se me da.

Esta vez, te creí, tras todas nis reticiencias, aplicando el sentido común, a tu entusiasmo.
No tenía por qué ser pasajero esta vez.
Llevas razón que el que me quieras para siempre no tiene por qué significar ya mismo.
Que nos quemaríamos en seguida de asfixiar una ilusión tan bonita a base de convivencia prematura.

Pero no logro explicártelo.
Ni yo creo ni quiero dicha convivencia.
Pero sçi me da fé tu deseo.

Sí, sí necesito demostraciones de afecto.
Pensar, como decías, que soy el amor de tu Vida.
Y que tus "te amo" son únicos hacia mí.

De repente, soy yo la egoñista y enferma por no ver claro del todo la relación gallega materna de exacerbado matriarcado, posesividad que se estrapola a hermanas incluso, como hembras, más que como madre y hermanas.

No entiendo que sea yo la que haga un sobreesfuerzo físico, mental y económico en cada encuentro, y esté obligada a dejar incluso lo que me hace sentir bien en el día (básico, higiene personbal y armonía en la casa); llevar a cabo unos planes de ilsión ( es bonito que sólo quieras estar conmigo, abrazados, pero es que ni comer...), y también tu impotencia me plantea dudas.

No veo respeto, sino doblegación.
No veo enamoramiento, sino un capricho, un as en la manga para un posible futuro.
Cuando tú decidas, porque vayas a estar solo, y como y donde tú decidas.

Corro.
Me precipito.
Pienso en abandonar todo por tí.
En que para tí mi necesidad de Sol es una chorrada.
Y mi "egoísmo" por no entender que quieres vivir con tu madre y hermana de por vida, te aleja de mí.

Yo he cocinado, recogido limpiado... mientras tú aniquilabas uno a uno mis planes, y mi ilusión, metido en cama y con el ordenador en mano.
Te has traído tu habitat a esta casa que, encima, te hace sentir extraño.

Esperaba más hombría.
En todo.

Como bien dices: "qué engañada estás".

Estresadísma por intentar ofrecerte lo mejor, ya puedes ver que me falta tiempo para todo, y aún, desagradecido, me dices un "está bueno" que hiere más que halaga.
No he tenido ni un minuto para arreglarme, para qué, si no íbamos a salir.
Pero tú sí.
Y encima se me exige estar en forma, guapísima...

Estoy harta.
De tios que me toman el pelo.
De ser tonta.

De sentirnme utiizada,poco valorada, nada amada.

Sí, claro que los abrazos son maravillosos.
No me los das. Es porque te faltan los de tu madre.

areeglaré este post en otro momento.
Pero ni soy yo, ni sacas lo mejor de mí.

Y te has cargado toda mi ilusión, mi escasa fé en tí, en el Amor, en que fueras para siempre, con tu hiriente: "no corras tanto. nos hemos visto dos veces".
Ajá. De repente.


No te preocupes.
Nad de loq ue es importante para mí lo es para tí.
Ni mis planes, ni siquiera me has ayudado con nada.
Era yo la que necesitaba amor.

Ni sexo he recibido.
No te empalmas, siquiera?
Pero me alegra saber que estás eqiivocado: sí...por suouesto que sí que encontraré a alguien que me quiera más que tú.

Ya me dirás si es tan difícil que me hagan el amor en condiciones, que respeten mi personalidad y vean virtudes en mi capacidad organizativa o en ser limpia, por ejemplo>, que me haga sentir mujer permitiéndome lucir, arreglarme, salir, étc., y por encima de todo, que me digan "te amo" con voz de hombre, no con tono de niño.


.

20 febrero, 2011

Luna, hormonas & 2:00 a.m.

.



.

No te lo pongas fácil.
No me hagas sentir fácil.

No me valen los "te quiero" mezclados con whisky, con la ilusión de ver a tus amigos.
De saberse respetado, admirado y querido por tod@s.

Ni las horas generosas de palabras cuando gratuitas, por no tener mejor ocupación.

Cámbiame.
Pero no como pretendes.
Respeta mis ya tomadas decisiones de hace años.

Cámbiame en prioridad y que yo lo note.
Ven a estar conmigo cuando yo lo necesite, no sólo cuando a tí te venga bien...como a ellos.
Que vea "algo".
Maldita manía la de las mujeres de necesitar sacrificios como pruebas de amor.
No predicamos con el ejemplo:
quien ama no debería esperar sufrimiento alguno en el amado...pero nosotras, caprichosas, lo necesitamos.
Las inseguras, digo.
La otra raza, van de sobradas.
Que tanto os gusta.
Y os engañan.

&

Que sean coherentes las palabras, que los te "amo" den la mano a las acciones, si tanto me echas de menos...

No quiero echarte yo a tí...nada en cara.
Pero hazme sentir quien me dices que soy.
Para ti.

Y déjame fluir como soy, sin presión.
No todas podemos medir 1,80, vestir de Armani y llevar el pelo liso.
Algunas tenemos una vida real, mal que nos pese.

.

Foto:
http://entretenimiento.es.msn.com/cine/fotos.aspx?cp-documentid=156167688

.

17 febrero, 2011

Solamente tú.

.

A veces sólo hace falta un poco de música, una buena canción, algo de calor..y fé.

Suena el aire huracanado, y en lugar de aplacarlo con la esperanza del Sol que sabré vendrá, lo escucho con miedo y atención.

Está bien que nos guste lo auténtico, pero no avanzamos.

Podría abrir el blog casi por cualquier página, que la encontraría. Ahí mismo, mirándome sin más: la amargura.

Anclada en el sufrimiento pasado y enganchada a la preocupación futura, aún sabiéndome más afortunada que nunca.

Seguro que lo he escrito antes: me pregunto si soy capaz de ser feliz.

Seamos sinceros: la incapacidad me define.

Incapacidad laboral: cometo errores por falta de interés y exceso de cansancio. Pero los cometo, sin necesidad.

Incapacidad de amar: mis miedos aburren al más paciente, como si deseara que ocurriera, como si quizá, proyectando mi intolerancia, creyera justo que nadie pudiera soportar mis defectos.

Incapacidad de ser feliz.

No quiero seguir tan triste, no puedo más.

Extraña novedad: a ratitos, soy tan feliz, que estoy desubicada.

.

.

30 enero, 2011

Cansancio

.

O agotamiento.

Frustración, tristeza, preocupación.

Estupideces todas, cuando soy tan afortunada.



Mucho pensar en un Futuro que me da más pánico que alegría, con un presente que no se materializa...
...como si teoría y práctica fueran por separado;
como si tus palabras y tus acciones, no se correspondieran.



Paso de i-phones, de la Noche y sus tías buenas que sólo viven para eso...quizá debería ser una de ellas, pasármelo bien, tener el ego siempre en forma y sentirme el centro de atención, con planes B all the time, just in case...

Después de todo, lo mismo son más listas. Se lo pasan mejor.

Después de todo, yo ya no tengo casi ambición laboral.
Nada me motiva.

Sólo siento frustración.
Una relación se basa en relacionarse.

Ahora ya he escuchado demasiadas cosas que no hubiera deseado saber.

Y sé que al final, siempre, en malas noches como hoy, no hay realmente nadie.

Hasta para mi mejor amiga, he tenido que pasar por el aro.
O con su novio delante, o nuestras conversaciones no tienen lugar.
Tres son multitud incluso opinando, para mí, que tan celosa soy de mi intimidad.

Tú y yo, blog, a lo más, somos dos.
Y al menos tú, sí que siempres estás.

Estoy harta de tener que hacer todo como quieren los demás.

De repente vuelvo a perderme, a no reconocerme.
Y a encontrarme con ese mi lado oscuro tan dañino..., tan afortunadamente olvidado duranet meses.
Ahora vuelven a aflorar en mí las preguntas llenas de pavor e inseguridad.

Y me dan ganas, como siempre..., de desplegar toda mi cobardía, de salir huyendo, de decir en alto: "no soy capaz"...

Porque no creo que nadie pueda realmente entenderme, comprenderme, llevarme, adorarme.

Me parece imposible que alguien de verdad pueda ver tanta belleza en mí.
No creo a nadie tan capaz.

.

16 enero, 2011

Yo

.

Estaba bien estando sola.
Sola con mi casa, mi trabajo, mi nuevo círculo social, mis inquietudes culturales de siempre. Mis gatos.

Pero me dió por pensar que me faltaba algo: ilusión.

Y me salió bien.

Es mi pesimismo, mi poca fé después de todo, la que consigue arrebatarme la vida.

Empiezo a pensar que me gusta sufrir.
Que estoy enferma.
Que a lo mejor necesito medicación para no sentir.

Para no sentir que estando inerte, sola como siempre, sin ninguna iusión, la vida carece de sentido.

Curiosa la vida...
Visitaba hoy por fin que ya tenía dinero, las tiendas del centro.
No lo he soportado.
Carecía de sentido.

No creo en la Cosmética como no creo de nuevo en el Amor, ni otras falacias.
Qué triste la vida así.
Qué triste.

.


.

Realidad?

.

Sabía que podía pasar.
Que había que acostumbrarse.
Descubrirse.
Encontrarse.

Decidir.
Me he equivocado en todo.
En pensar que realmente empatizarías pero me comprenderías mejor.
En pensar que me creerías al decirte que estaba agotada, y que me dieras un poquito de tiempo.
En creerte.
Que no eras superficial y te daba igual la apariencia.

Me he equivocado al volver a querer que se me quiera.
Cuando ni siquiera yo sé si me gustas.


Te has equivocado de lejos en todo.

En hacerme infeliz.
En hundir mi ego femenino.
En creerte que sólo decides tú.

En cegarte, y ver el todo por la nada.
En no pararte a pensar un segundo que yo soy yo, con todas mis inseguridades y defectos que supuestamente tanto te gustaban, precisamente por mis experiencias de Vida.

Te has imaginado un nebuloso presente, un temible futuro lleno de malos rollos, cuando te he insitido que era todo pasado.

Té has equivocado en no analizar tu propia situación familiar, que también podría hacerme plantear muchas cosas. Porque para que tú fueras feliz, yo era quien iba a tener que cambiarme totalmente de ciudad, renunciar a mi mejor compañía, alejarme de quien me necesita, y sin ninguna garantía.
Percibiendo que lo mismo era un error.

No. No seré satélite pudiendo ser astro, como me hacías sentir días atrás.

Cobarde. Como todos.
Puedes decir lo que quieras.
Pero ha sido insultante.

Y no estás a la altura.

Sigue con una vida fácil.
Porque conmigo te la has imaginado oscura.
Seguramente te la merezcas.

En el fondo, yo también me siento culpable.
Por haberte roto la ilusión.
Por haberte hecho llorar, sufrir, pasarlo ma.
No me has dado oportunidad a demostrarte que soy mucho más, de hecho, soy todo el resto que tú veías antes.
No me has dejado aportar luz.

No sé si te lo mereces, pero es cierto, algo de cariño sí te tengo, pese a todo.
Quizá por eso me quitaré de tu camino, para que no sufras más.

.

Animales

.

Siempre buscan mi afecto.
Y me lo dan.

Incondicionalmente.

Animales?
.

15 enero, 2011

Extraño

.

A veces me pregunto si todo no ha perdido ya el sentido.

Si estamos avocados al fracaso sin más, o es sólo un nuevo error, donde ya necesite pautas ajenas para sostener lo que si ya esta vez falla, me parece insostenible.

No quiero ni un ápice más de tristeza.
No quiero fallar en todo una vez más.
En esto.

Me parece un sueño, y de repente, no sé qué hacer, manejarme, manejar la situación.

No es un extraño, pero me siento perdida, desorientada.
Con más ganas de amarle que antes.
Apostando a caballo ganador.

Sigo sin entender cómo algo que debería acercarle a mí, lo aleja.

No puedo permitirme que vea dolor, pero tampoco puedo quedarme todos los miedos y angustias dentro, razón de esta terapia llamada blog.

Me pregunto si alguna vez lograré no alimentar los miedos, dejar de huir, de abortar situaciones (relaciones?) que me dan miedo.

A ver si aguanta él.

11 enero, 2011

Terror

.

A veces me pregunto si no soy lo suficientemente deleznable como para buscar afecto a través de una historia triste.

Quizá sea el agotamiento, la falta de vitaminas y alguna otra gilipollez de las mías.

Lo cierto es que sé de sobra lo que me pone triste esta noche y no soy capaz de mirarlo a la cara.

Es el terror a enamorarnos?
No.

Es el pánico a que con el tiempo se disipe.

A que habiéndonos encontrado, algo pase que nos aleje.

Y ahora, curiosamente, ya sufro por la distancia.
No sé si es sano, natural o enfermizo, sentirse triste por la impotencia de no poderte dar la mano esta noche. No poderte tener cerca en la única dimensión que nos falta: la espacial.

Otros le llaman a esto "echar de menos".
A mí me dá pánico sentirme triste.

.

09 enero, 2011

Los otros

.

He conocido.
He sufrido.

Muchos.
Demasiado.

De todo pelaje y condición.

Me han engañado, se han engañado.

Mi pregunta siempre era la misma: Pero todo por un polvo?
Los que todo lo saben respondían: por el juego en sí.

.

Ya no sufro.
Sencillamente acepto.
Que si no es, ya llegará.
Que al menos yo, puse sinceridad.

Y con ello vida.
Y por ende, ilusión, ya sabemos.

Si una vez más se trata de un juego cruel, perderá más el otro.
De todo lo que yo le podía haber dado.

.

Yo tenía ganas.
Predisposición.

Escepticismo curado a base de la emotividad más bonita del mundo.
En una voz que parece honesta, limpia.

Nos da por compartir nuestra alegría.
Son los otros ahora los que hablan.
No tú y yo.

Me miran en silencio, con pena en la mirada.
Creen que me están engañando.

Como si yo no tuviese criterio.
O pudiese ser feliz.

Me recuerdan que quizá sea así.

Llego entonces triste a casa.

Pero me recuerdo que ya no sufro.
Que acepto.

Y me engaño yo misma, de nuevo.

.

No quiero que seas mentira.

Es más.
Necesito que seas verdad.

.

Con todo lo que ya me demuestras, no quiero molestarte con mis dudas,
así que será mejor dejar pasar las horas.

Y sencillamente, ir viendo.
Viviendo.

.

Me preocupa la precipitación.
Las frases llenas de significado no pueden decirse a la ligera.

Pero me fascina la pasión.
La claridad de ideas.

Que lo tengas tan seguro, me da una seguridad increíble.
Creíble.
Mejor creíble, que es lo difícil.

.

06 enero, 2011

Creer

.

He recibido el mensaje más bonito e ilusionante del mundo.
Mágico día de Reyes.
Ilusión.
Regalo divino.

Día de fé.
Día de Reyes.
Día de Príncipe.

Aún no me creo mi suerte y una emoción deliciosa me recorre.

.


Escribo ahora agotada, apenas abriendo los ojos.


Pero sigo sin dar crédito a mi gusto por la tristeza.
De repente, ya lo tengo.
Mi mejor sueño hecho realidad.

Y ha bastado mi cruel inseguridad, para sentirme desmotivada profesionalmente casi por completo.
Una carta de recomendación a una cría de 23, y mi autoestima se ha desmoronado mientras mis celos profesionales lloraban por dentro en silencio.
Pobre jefe al que todos detestan, y sin embargo, a quien deseamos constantemente seducir, complacer, demostrar.

El pánico al verme en el espejo de la ineficacia, la lentitud y la falta de capacidad intelectual, refrendado por una mínima reprimenda el otro día, me ha empequeñecido a límites absurdos.
Como buena cobarde, e inmadura, sólo deseo huír de un medio que ahora, me resulta hostil.
Innecesariamente agresivo, estresante.

.