Amor

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De todas las estupideces por las que los mortales nos mortificamos, el amor, es la más estúpida de todas.

Gratuitamente, no es necesario, y sin embargo, volvemos a sufrirlo una y otra vez, sin aprender jamás la lección.

Tomar demasiado en serio a los otros, a la Vida, cuando sólo deberíamos dejarnos empapar, sin más, de ríos de vino, luz y bien.

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Humo

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La lavadora no deja de repetir obsesivamente: "y ahora qué, y ahora qué?", y los parabrisas: "no sé, no sé...".

Todo confabula surrealistamente con mensajes subliminares.

Los miedos afloran, sin más, vacíos y sin embargo, poderosos.
Humo...que nubla lo precioso.

Por qué, por qué?
No lo quiero.

Fue el miedo, nada más, lo que arrastró a Anakin al lado oscuro.
Los juegos de la cabeza tiene razones que la razón no entiende.

Nos reprochamos seguir aún por ahí.
Los deberes siguen sin estar hechos.

Miedo dan otras cosas.

El miedo a uno mismo, otra vez, no...
Pues es todo fantasía, pero de sólo evocarlo, se torna realidad.

Dejarlo pasar, sin más,
es la solución a veces.

O quizá algo más?


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Creer...

...

o no creer, esa es la cuestión.

Hablo con mi padre y le digo que qué bonito sería saber que de verdad puede oírme, que ójala pudiera tener alguna señal.

De repente, en medio de un campo casi virgen por el que suelo pasear, un pequeño guiño, un algo que sólo él y yo podríamos entender, aparece entre la hierba.
Me empiezo a reír...
Y digo en voz alta: "Jaajajajaja, jajaja, de verdad?".

Miro al Cielo.

Después, unas lágrimas recorren la amargura de mis labios, aún sonrientes...

Perfecto paralelismo de la confusa relación amor-odio?, de sentimientos encontrados, que teníamos.

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Lo mismo sucede en todo.

Mi cabeza quiere calmar mi alma a base de ilusión, pero mi espíritu no vuela libre del todo y se cuestiona racionalmente qué es verdad, qué imaginación.

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Nos encontramos por azar.
Como siempre nos gusta pensar.
A todos.

Estábamos predispuestos.
Éso sí es verdad.

Por Messenger todos parecemos ingeniosos, divertidos, pero ya me lo sé...y no esperamos nada.
Es mejor.
Mejor aún que haya una gran distancia.
Imposible especular así nada.

&

Se suceden las conversaciones que me he propuesto desnudas,
francas,
puras.
Única forma de ser.
Si no, de qué?

&

Escuchamos nuestras voces.
Nos gustan lo que transmiten.
La mía, dices, dulzura.
La tuya, me guardo, honestidad.
Y algo más.

&

Tres días libres, no nos conocemos de nada, jamás nos hemos visto.
Y de poder, me vendrías a recoger.

No sólo el gesto es generoso. Te molestarías en bajar tú.
Sino que improvisar, tranquilos, así, sin esperar nada ni engañarnos, tan sólo queriendo tener buen rollo, con ganas de conocernos sin más, es fantástico.

Fan-tás-ti-co.
That´s the question.

Imaginëmos despliega su imaginación:
Llegas hasta mi dirección.
Te invito directamente a tomar algo y descansar.
Has hecho un viaje muy largo.
"Ya hablaremos, te digo.
Tenemos muchas horas de viaje para poder conocernos".

Y extrañamente, te sientes nada extraño, todo confiado, y consigues quedarte dormido.
Apenas hablamos.
Tan sólo nos miramos.
Sonreímos.
Callados.


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Es bonito.

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