.
.


16 octubre, 2010

2 X 0

.

Dos tabletas en dos días.
Me he pimplado.
Sí señor.

Por decir demasiados "sí señor".

Para compensar.
Para trasgredir.

El viciado círculo laboral me ha sumido en un perjudicial círculo vicioso: al llegar tan exhausta como asqueada a casa, bajo el felpudo del desánimo, atisbo a revisar esa ya tan descompensada de por sí quiniela de la vida, donde el equipo de las alegrías siempre pierde por cero a dos desde hace demasiados años, y no encontrando sentido alguno a dicha existencia llena de vanos intangibles y agujeros negros infinitos, sólo me queda el triste recurso de drogarme.

Pero como toda droga, el chocolate atiborra mente y cuerpo.

Que siempre van unidos.
Recordemos.
Para qué explicar más.

.

No hay comentarios:

Publicar un comentario